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Obtenga más informaciónLa leucemia mieloide aguda (LMA) es un cáncer en la sangre y la médula ósea. Cuando una persona tiene leucemia, las células cancerosas desplazan las células sanguíneas sanas, lo cual puede causar fiebre, fatiga, formación de moretones con facilidad, sangrado, infecciones y otros problemas. Leucemia aguda significa que los síntomas habitualmente empeoran en un breve período de tiempo. Los niños pueden enfermarse muy rápidamente y necesitan recibir atención médica de inmediato.
Esta imagen muestra el aspecto de una médula ósea normal y sana a través del microscopio.
Esta es la médula ósea de un paciente pediátrico con leucemia mieloide aguda.
La LMA afecta las células sanguíneas denominadas células madre. Normalmente, la médula ósea fabrica células madre precursoras de la sangre que se convierten en células madre mieloides o en células madre linfoides. Una célula madre mieloide se convierte en uno de los tres tipos de células sanguíneas maduras:
En casos de LMA, los signos y síntomas incluyen los siguientes:
Generalmente, se requieren análisis de médula ósea para diagnosticar la leucemia. Los médicos pueden comenzar a sospechar que se trata de leucemia luego de realizar un examen físico, ver los antecedentes médicos y observar los resultados de los análisis de sangre. Los niños con leucemia generalmente tienen un gran número de glóbulos blancos inmaduros en la sangre.
Si se determina que hay cáncer, se realizarán más análisis para precisar el subtipo de cáncer. Estas pruebas incluyen lo siguiente:
Las pruebas para determinar si el cáncer se ha diseminado incluyen las siguientes:
El tratamiento depende del tipo de LMA. Existen tres formas de LMA, leucemia promielocítica aguda (LPA), LMA en niños con síndrome de Down y LMA con mutación en el gen FLT3, que se tratan de manera diferente de las demás formas de LMA. La quimioterapiaes el tratamiento principal para la LMA. El trasplante de médula ósea también puede ser una opción.
Los médicos reúnen la información para comunicar el tratamiento.
El paciente deberá someterse a la colocación de una vía venosa central tunelizada u otro dispositivo de acceso venoso central para la administración de quimioterapia y líquidos, y para tomar muestras de sangre.
El objetivo de la terapia de inducción es destruir las células de la leucemia en la sangre y la médula ósea y hacer que la enfermedad entre en remisión.
Debido a que los pacientes con LMA son vulnerables a contraer infecciones, también se suministra una terapia de apoyo con antibióticos.
Es posible que también se administre la terapia santuario del sistema nervioso central (SNC) (también denominada profilaxis del SNC) durante este período para destruir las células de leucemia que quedan en el cerebro y la médula espinal.
Los médicos probablemente observarán qué tan bien resultó la quimioterapia de inducción para decidir si es necesario un trasplante de células hematopoyéticas. De hecho, los pacientes y las familias pueden someterse a la tipificación de antígenos leucocitarios humanos (HLA) para identificar posibles donantes en caso de que el paciente necesite someterse a un trasplante.
Muchos centros de pediatría utilizan pruebas altamente sensibles para medir la enfermedad mínima residual (EMR). Un resultado positivo para EMR indica un mayor riesgo de recaída y la necesidad de una terapia más intensiva.
Esta fase de consolidación empieza luego de que el paciente entra en remisión. Su objetivo es destruir las células de la leucemia que puedan quedar.
Comprende entre 2 y 4 ciclos de quimioterapia.
Algunos pacientes pueden recibir un trasplante de células hematopoyéticas en este estadio. Si a un paciente se le realiza un trasplante, será hospitalizado por varias semanas. Probablemente pase un año antes de que el paciente pueda regresar a la escuela.
1. Inducción
El objetivo de la fase de inducción es destruir las células de la leucemia en la sangre y la médula ósea y hacer que la enfermedad entre en remisión. Debido a que los pacientes con LMA son vulnerables a contraer infecciones, también se suministra una terapia de apoyo con antibióticos. Es posible que también se administre la terapia santuario del sistema nervioso central (SNC) (también denominada profilaxis del SNC) durante este período para destruir las células de leucemia que quedan en el cerebro y la médula espinal. Estos medicamentos se inyectan en el espacio lleno de líquido que se encuentra entre las capas delgadas del tejido que recubren la médula espinal (por vía intratecal).
La terapia de inducción generalmente comprende una combinación de medicamentos como citarabina y un medicamento de tipo antraciclina, conocido más comúnmente como daunorrubicina, en combinación con etopósido o tioguanina.
2. Consolidación/intensificación/posinducción
El objetivo de esta fase es destruir las células de la leucemia restantes que podrían crecer y causar la recaída del cáncer. Los centros oncológicos pueden realizar pruebas que pueden detectar una sola célula de LMA entre 1000 células normales. Los niños que tienen más de una célula en 1000 luego de completar la fase de inducción tienen un mayor riesgo de recaída.
Esta fase de consolidación empieza luego de que el paciente entra en remisión. Incluye de 2 a 4 ciclos de quimioterapia y dura entre 4 y 6 meses. Dicha terapia incluye algunos de los medicamentos utilizados en la inducción, mientras que también introduce medicamentos sin resistencia cruzada y generalmentecitarabina de dosis alta.
Se puede recomendar un trasplante de células hematopoyéticas (también denominado trasplante de médula ósea o trasplante de células madre) a niños que tienen un riesgo alto de recaída o cuya LMA es resistente al tratamiento. A veces, los médicos observarán qué tan bien resultó la quimioterapia de inducción para decidir si es necesario un trasplante de médula ósea.
Los pacientes con LMA pueden recibir untrasplante alógeno.
En un trasplante alógeno de médula ósea, los niños reciben células que producen las células sanguíneas de un donante sano. Los pacientes deben contar con un donante sano que sea apto para el trasplante. Antes de recibir las células del donante, las células sanguíneas existentes en la médula ósea del paciente se destruyen mediante quimioterapia y, a veces, radiación. El paciente recibe las células sanguíneas y las células de la médula del donante sano a través de una infusión. Si es satisfactoria, estas células nuevas del donante crecerán y reemplazarán las células sanguíneas y las células de la médula del paciente. Como resultado, la médula ósea del paciente deberá comenzar a producir células sanguíneas sanas.
La tasa de supervivencia a cinco años para la LMA en niños es de alrededor del 70 %.
Alrededor del 90 % de los niños con LMA no tienen células cancerosas en la sangre luego del tratamiento inicial. Alrededor del 30 % de los niños con LMA presentan recaídas o tienen una enfermedad resistente al tratamiento (resistencia).
Un efecto tardío es un problema de salud que ocurre meses o años después del diagnóstico de una enfermedad o después de que el tratamiento haya terminado. Los efectos tardíos pueden ser causados por el cáncer o el tratamiento del cáncer. Pueden incluir problemas físicos, mentales y sociales u otros cánceres.
Los efectos tardíos pueden incluir los siguientes:
La investigación actual se centra en crear tratamientos más eficaces para los niños cuyo cáncer no responde a la terapia original mediante el desarrollo de más terapias dirigidas a las células cancerosas sin dañar las células sanas circundantes y el diseño de terapias eficaces con menos efectos secundarios.
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Revisado: Junio de 2018