Las Vacunas contra la COVID-19 y los Sobrevivientes de Cáncer Infantil

Sí, es seguro recibir la vacuna si tiene un sistema inmune debilitado. Sin embargo, es posible que la vacuna no sea tan eficaz. Si recibió la vacuna de Pfizer-BioNTech o Moderna, es posible que reúna los requisitos para recibir dosis adicionales.

Por lo general, se recomienda recibir las vacunas después de un trasplante para protegerlo de diferentes infecciones. Visite el artículo Vacunas Después del Trasplante de Células Hematopoyéticas de Be the Match para obtener más información. Si tiene preguntas, comuníquese con su equipo de atención de trasplantes.

En general, se recomienda recibir las vacunas en el caso de las personas que se han sometido a la extirpación del bazo. Para obtener más información sobre las vacunas después de la extirpación del bazo, visite la página de los CDC en la que se aborda este tema. Si tiene preguntas, comuníquese con su proveedor de atención médica.

No se debería vacunar contra la COVID-19 si tiene antecedentes de reacción alérgica grave a cualquier componente de la vacuna.

Vacunas de Pfizer y Moderna

Las vacunas contra la COVID-19 de Pfizer-BioNTech y Moderna contienen polietilenglicol (PEG). El PEG es un ingrediente principal de algunos laxantes y preparaciones intestinales para procedimientos de colonoscopia. También se utiliza en algunos medicamentos inyectables. No reciba la vacuna de Pfizer-BioNTech o la vacuna de Moderna si tiene una alergia al PEG.

Si experimenta una reacción alérgica grave a la primera dosis de las vacunas de Pfizer o Moderna, no reciba la segunda dosis.

Vacuna de Johnson & Johnson

El polisorbato 80 es un componente de la vacuna de Johnson & Johnson. No reciba la vacuna de Johnson & Johnson si tiene una alergia al polisorbato.

Hipersensibilidad al PEG y al polisorbato

El PEG y el polisorbato están estrechamente relacionados entre sí. En ciertas ocasiones, se puede producir una “hipersensibilidad de reacción cruzada”.

Es posible que le preocupe recibir cualquiera de las vacunas si tiene alergia a estos componentes.

Sin embargo, las personas alérgicas al PEG pueden recibir la vacuna de Johnson & Johnson. Las personas alérgicas al polisorbato pueden recibir las vacunas de Pfizer y Moderna.

Consulte a su médico si puede recibir el otro tipo de vacuna. Si la respuesta es sí, informe a la persona que le administra la vacuna que tiene una alergia al PEG o al polisorbato.

Para obtener más información, visite el artículo Vacunas contra la COVID-19 para Personas con Alergias de los CDC.

Las reacciones alérgicas causadas por alimentos, mascotas, picaduras de insectos u otras cosas no impiden que se le administre una vacuna contra la COVID-19 o que necesite adoptar precauciones especiales.

Es seguro vacunarse contra la COVID-19 si tiene alergia al huevo.  A diferencia de algunas vacunas contra la gripe, las vacunas contra la COVID-19 actuales no se fabrican con huevo.

Como siempre, informe a la persona que le administra la vacuna sobre sus antecedentes médicos, incluidas las alergias conocidas.

Embarazo o Planificación de un Embarazo

Las mujeres embarazadas presentan un mayor riesgo de sufrir problemas causados por la COVID-19.

Las mujeres embarazadas y aquellas que desean quedar embarazadas deben vacunarse tan pronto como la vacuna se encuentre disponible para ellas.

Los datos muestran que los riesgos de complicaciones en el embarazo o de aborto espontáneo no son mayores en las mujeres vacunadas.

No se presentó ninguna preocupación relacionada con la seguridad entre las mujeres vacunadas durante el embarazo ni en los bebés nacidos de madres vacunadas.

Lactancia

La lactancia materna sigue siendo segura, e incluso recomendada, durante la pandemia. Es poco probable que las vacunas contra la COVID-19 durante la lactancia sean perjudiciales para la madre o el bebé. De hecho, es posible que la leche materna proporcione algo de protección inmunitaria contra la COVID-19 para el bebé. Los estudios han demostrado que los anticuerpos contra el SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19, se puede encontrar en la leche materna después de la vacunación. Además, vacunarse ayuda a proteger a los niños del mismo hogar que no pueden recibir la vacuna. Tanto el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (ACOG, por sus siglas en inglés) como la Academia de Medicina de la Lactancia (ABM, por sus siglas en inglés) recomiendan la vacuna contra la COVID-19 para mujeres que se encuentren en período de lactancia.

Como siempre, las mujeres deberían comunicarse con su médico si tienen preguntas o inquietudes específicas.

Sí, se recomienda la vacuna incluso si ya tuvo COVID-19. La respuesta inmunitaria a la enfermedad por COVID-19 puede variar ampliamente. No se sabe cuánto tiempo dura la protección. Sin embargo, en los estudios se indica que vacunarse después de contraer la COVID-19 mejora el nivel de anticuerpos que lo protegen.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan que cualquier persona que pueda recibir una de las dos vacunas de ARNm (Pfizer-BioNTech o Moderna) lo haga. Sin embargo, la vacuna de Johnson & Johnson está disponible para los mayores de 18 años que no pueden recibir una vacuna de ARNm debido a problemas como una alergia grave.

Esta recomendación se basa en lo siguiente:

• Evidencia y eficacia
• Seguridad
• Eventos adversos

El Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización para la prevención de la COVID-19 recomienda recibir cualquier vacuna (incluida la vacuna de Johnson & Johnson) antes que no vacunarse. 

Se informaron efectos secundarios después de recibir la vacuna contra la COVID-19. Sin embargo, las reacciones graves han sido muy poco frecuentes.

Los efectos secundarios pueden incluir enrojecimiento, dolor o inflamación temporal en el lugar de la inyección. Se puede presentar dolor de cabeza, fiebre, fatiga, escalofríos, náuseas o dolores corporales. Por lo general, estas reacciones son leves y desaparecen en un par de días. El ibuprofeno y el paracetamol pueden ayudar a aliviar algunos de los síntomas.

En casos muy poco frecuentes, se ha informado de casos de miocarditis y pericarditis. Es importante recordar que los riesgos de estas afecciones son mucho menores que los de una infección por COVID-19.

Se informaron algunos casos de reacciones alérgicas. Sin embargo, estas reacciones ocurrieron en personas que presentan una alergia grave a la vacuna o a sus componentes.

Si decide no vacunarse, aumenta el riesgo de enfermarse a causa de la COVID-19. Además, al no vacunarse, pone en riesgo a aquellos que viven e interactúan con usted a diario.

Las personas que cumplen con las condiciones que se indican a continuación se consideran totalmente vacunadas:

• Ha transcurrido un período igual o superior a 2 semanas tras recibir la dosis final de la vacuna de Pfizer-BioNTech o Moderna.
• Ha transcurrido un período de 2 semanas tras recibir 1 dosis de la vacuna de Johnson & Johnson.

Las vacunas de Moderna y Pfizer-BioNTech son vacunas de ARNm.

La vacuna de Johnson & Johnson es una vacuna de vector vírico.

Las vacunas de ARNm enseñan a nuestras células cómo producir copias de proteínas en la superficie del virus que causa la COVID-19.

La proteína desencadena la respuesta inmunitaria del organismo para reconocer y responder si se expone al germen en el futuro.

La vacuna de ARNm no puede enfermarlo. Se disuelve rápidamente en el organismo. No puede cambiar su ADN de ninguna manera.

La vacuna de Johnson & Johnson es una vacuna de vector vírico. Se enfoca en las proteínas S presentes en la superficie del virus.

Una vacuna de vector vírico utiliza una versión inofensiva de un virus diferente llamado “vector” para entregar información a su organismo que lo ayuda a protegerlo.

La vacuna le enseña a su organismo cómo producir copias de las proteínas en la superficie del virus. Si más adelante se expone al virus real, su organismo lo reconocerá y sabrá cómo combatirlo.

La vacuna no contiene el virus que causa la COVID-19. No puede transmitirle el virus de la COVID-19.

Las vacunas contra la COVID-19 autorizadas o aprobadas en EE. UU. no contienen virus vivos. Son seguras, incluso si sus defensas inmunitarias son débiles.

El trabajo en equipo entre científicos, médicos y trabajadores de la salud pública hizo posible que el desarrollo y las pruebas se llevaran a cabo de forma rápida. Estos mismos grupos siguen trabajando juntos para monitorear los efectos secundarios poco comunes y las respuestas inmunitarias con el paso del tiempo.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos regula las vacunas. La FDA trabaja con científicos, desarrolladores de vacunas y agencias federales y estatales para garantizar que las vacunas cumplan con estándares rigurosos de seguridad y eficacia.

Científicos y médicos de la FDA evalúan los datos de manera independiente. En función de los datos, la FDA puede autorizar una vacuna contra la COVID-19 según las disposiciones de la Autorización de Uso de Emergencia (EUA, por sus siglas en inglés).

Después de la autorización, los ensayos clínicos continúan llevándose a cabo. Se dispondrá de más datos. Las empresas que desarrollan las vacunas contra la COVID-19 trabajan para obtener la aprobación total de la FDA. La FDA, los CDC y otros organismos de salud continuarán supervisando la vacuna.

Para obtener más información, consulte el artículo Explicación de la Autorización de Uso de Emergencia para las Vacunas de la FDA.