Saltar al contenido principal

Masoterapia

¿Qué es la masoterapia?

La masoterapia es un tipo de terapia complementaria que utiliza técnicas de masaje, presión y manipulación de los tejidos blandos del cuerpo. La masoterapia puede ayudar a aliviar el dolor, la incomodidad, la tensión y el estrés. Los pacientes, así como los cuidadores de la familia, pueden beneficiarse con los masajes y lograr una mejoría en la calidad de vida durante el cáncer.

Tipos de masaje

El masaje involucra la manipulación de los tejidos blandos del cuerpo a través de distintos métodos. Habitualmente, se realiza con distintas frecuencias, ritmos, direcciones e intensidades. El masaje puede hacer uso de otras técnicas, como la aromaterapia o la terapia con calor.

En general, los masoterapeutas se especializan en uno o más tipos de métodos. Existen muchas técnicas de masaje. Algunos tipos habituales de masaje incluyen los siguientes:

  • El masaje sueco se considera el masaje “tradicional”. Incluye movimientos largos de deslizamiento, caricias, presión firme, fricción o tamborileo.
  • El masaje de los tejidos profundos es un masaje de cuerpo completo que sirve para aliviar la tensión muscular. Hace uso de presión más fuerte y profunda para abordar los problemas en los músculos y el tejido conectivo.
  • El shiatsu es una práctica en la que el terapeuta aplica presión en determinados puntos del cuerpo con los dedos de la mano, los codos, las rodillas o los pies.
  • La terapia neuromuscular es un tipo de masaje especializado en el que se utiliza la presión en puntos disparadores con el objetivo de aliviar el dolor y mejorar la función.
  • La reflexología es un tipo de masaje de acupresión que utiliza presión aplicada a distintos puntos de las manos y los pies.

Descubra la diferencia entre la masoterapia para adultos y la masoterapia pediátrica.

Beneficios de los masajes

Los posibles beneficios del masaje durante el cáncer incluyen los siguientes:

  • Alivio del estrés
  • Mejor control del dolor
  • Menos náuseas y vómitos
  • Relajación
  • Mejor flujo sanguíneo
  • Menor presión arterial
  • Reducción de los síntomas de ansiedad y depresión
  • Mejoría en el sueño
  • Menos fatiga y más energía
  • Sensación de mayor bienestar

Cuando se ofrece el masaje como terapia complementaria, los niños se sienten más empoderados para sobrellevar el cáncer. Los cuidadores también pueden beneficiarse de la masoterapia.
También se les puede enseñar a los padres a brindar ciertos tipos de masajes a sus hijos. Esto puede tener beneficios adicionales. Los masajes pueden ayudar a profundizar la relación entre padres e hijos, y permiten que la familia participe más en el manejo de los síntomas.

Seguridad de los masajes durante el cáncer

En general, la masoterapia es segura si es utilizada de manera adecuada por un profesional capacitado. Los masoterapeutas con licencia han recibido educación formal y reúnen los requisitos para las credenciales estatales. Algunos masoterapeutas tienen capacitación y certificaciones adicionales, y pueden especializarse en masajes para oncología.

Es posible que deban adaptarse las técnicas de masajes para satisfacer las necesidades de los pacientes con cáncer. Los terapeutas deben evitar la presión fuerte y el área que está directamente sobre el tumor o el lugar del tratamiento. Se necesita un cuidado especial en el caso de los pacientes que tienen las siguientes características:

  • Heridas abiertas
  • Piel irritada o con moretones
  • Coágulos de sangre, trastornos de coagulación o en tratamiento con medicamentos para los coágulos de sangre, como Coumadin
  • Hemogramas con conteos bajos
  • Metástasis o fracturas óseas
  • Sensibilidad de la piel debido a los tratamientos oncológicos
  • Linfedema
  • Neuropatía periférica u otro dolor nervioso
  • Dispositivos médicos

Los riesgos del masaje incluyen los siguientes:

  • Moretones
  • Inflamación temporal o dolor muscular
  • Reacciones alérgicas a los aceites o las lociones utilizados durante el masaje

Antes de probar la masoterapia, las familias deben hacer lo siguiente:

  • Consultar con el equipo de atención. Consultar sobre cualquier precaución especial necesaria. El equipo de atención puede recomendar a un terapeuta que trabaje con niños o se especialice en el masaje de oncología.
  • Hablar con el masoterapeuta y verificar sus credenciales. Analizar las necesidades médicas y los objetivos del tratamiento. Consultar cuáles son las expectativas en torno a la sesión. Hacer preguntas y analizar cualquier inquietud.
  • No utilizar el masaje como reemplazo de los tratamientos estándar recomendados por el equipo de atención.


Revisado: junio de 2018