Cómo Usar y Cuidar una Férula

El uso de una férula ayuda a su hijo(a) a usar mejor sus manos y brazos. El tipo de férula y el momento en que se debe usar depende de las necesidades de su hijo(a). Algunos niños usan la férula solamente cuando están despiertos y activos. Otros pueden usar una férula solo por la noche. Algunas férulas pueden ser blandas y flexibles, y otras duras y rígidas.

El terapeuta de su hijo(a) le dará una férula del tipo y tamaño exactos que necesita. Su hijo(a) aprenderá cómo ponerse la férula y cuándo debe ponerla.  

Cómo cuidar la férula

• Limpie la férula con jabón y agua tibia y frote con un cepillo pequeño de cerdas suaves.
• Lave las correas de velcro a mano con agua tibia y jabón.
• Deje que la férula se seque al aire.
• Use alcohol para fricciones para limpiar el interior de las férulas de plástico duro para reducir el olor.
• Para evitar que la férula se derrita o se queme, manténgala alejada del calor o las llamas. No la deje en un automóvil caliente y no la coloque cerca de un calentador de agua o un radiador.

Puntos que hay que tener en cuenta

La férula de su hijo(a) no debe causar dolor ni molestia. Tenga cuidado con problemas como:

• Áreas de enrojecimiento, ampollas o llagas que no desaparecen en 20 minutos después de quitarse la férula
• Hinchazón
• Cambio de color en la mano o el brazo, que parezca indicar que la sangre no fluye bien
• Rigidez, dolor o pérdida de sensibilidad en la mano o el brazo

Si su hijo(a) presenta alguno de estos síntomas, debe dejar de usar la férula y usted debe llamar a su terapeuta de inmediato.