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Cuidado de la Boca y Salud Bucal

Es importante cuidar bien la boca de su hijo(a) y estar atento(a) a los problemas que podrían surgir. Los problemas bucales como las llagas dolorosas, la sequedad bucal, los labios agrietados y los problemas dentales son frecuentes en niños con cáncer y otras enfermedades.

Una rutina de cuidado de la boca contribuye a la salud bucal de su hijo(a), ahora y en el futuro. El cuidado bucal puede incluir los siguientes elementos:

  • Cepillarse los dientes.
  • Usar enjuague bucal.
  • Usar bálsamo labial.
  • Usar hilo dental, si lo recomienda el equipo de atención médica.
  • Evitar la sequedad bucal.
  • Revisar los dientes, las encías y la boca para detectar problemas.
  • Administrar crioterapia durante la quimioterapia a fin de ayudar a prevenir las llagas bucales.
  • Acudir a consultas regulares con el dentista.

Asegúrese de seguir una rutina de cuidado de la boca, incluso si su hijo(a) tiene una sonda de alimentación o no come por vía oral. Su equipo de atención médica puede brindarle instrucciones especiales para el cuidado de la boca si su hijo(a) tiene llagas en la boca, recibe ciertos tratamientos, recibió un trasplante de médula ósea (células madre), o bien las cifras de su hemograma son bajas.

Padre enseñando a su hijo a cepillarse los dientes correctamente.

Observe a los niños menores de 6 años para asegurarse de que se cepillen bien.

Cepille los dientes, al menos, dos veces al día

Use un cepillo de dientes suave para cepillar los dientes y la lengua, al menos, dos veces al día. Cepille siempre después de consumir dulces, o bebidas o alimentos azucarados.

  • Use pasta dental con flúor con el sello de aprobación de la American Dental Association (ADA).
  • Si su hijo(a) tiene menos de 6 años, use una cantidad del tamaño de un guisante.
  • Si su hijo(a) tiene menos de 3 años, use una cantidad aproximada del tamaño de un grano de arroz.
  • Use un cepillo de dientes suave. Déjelo secar completamente después de cada uso.
  • Asegúrese de que su hijo(a) no se trague la pasta dental. Si su hijo(a) tiende a tragarse la pasta dental, limpie sus dientes solo con agua.
  • Observe a los niños menores de 6 años para asegurarse de que se cepillen bien.
  • Si no es posible usar un cepillo dental, los dientes se pueden limpiar con un trozo de gasa húmeda envuelta alrededor de un dedo. También puede usar una esponja pequeña o un cepillo de espuma. Pida ayuda a su equipo de atención médica para obtener estos artículos.
  • Reemplace el cepillo dental cada dos meses o antes si las cerdas se desgastan.
  • Use un nuevo cepillo dental todos los días en los siguientes casos:
    • Su hijo(a) recibió un trasplante de médula ósea (células madre).
    • El recuento absoluto de neutrófilos (RAN) de su hijo(a) es inferior a 500.
    • Su hijo(a) tiene una infección o sangrado en la boca.
  • Si el RAN de su hijo(a) es superior a 500, remoje el cepillo dental con un enjuague bucal con gluconato de clorhexidina durante 15 minutos todos los días. Este enjuague bucal también se denomina GCH o Peridex®. Si su hijo(a) no está hospitalizado(a), puede usar un enjuague bucal Listerine® en caso de que no pueda conseguir GCH o Peridex.     

Use enjuague bucal

Los enjuagues bucales pueden ayudar a limpiar la boca y tratar problemas como la sequedad bucal o las llagas en la boca. Use enjuagues bucales o colutorios recetados por su equipo de atención médica. Enjuague la boca de su hijo(a) con entre cinco y diez mililitros (ml) de enjuague bucal, al menos, tres veces al día. Los enjuagues bucales incluyen Biotene®, solución salina alcalina y Cepacol®.

Use hilo dental según las recomendaciones

Use hilo dental a diario, a menos que el equipo de atención médica le indique lo contrario. A menos que su hijo(a) tenga llagas en la boca o las cifras de su hemograma sean bajas, por lo general, se recomienda usar hilo dental. Verifique con su equipo de atención médica si no está seguro(a).

Use bálsamo labial

La piel de los labios es delgada y delicada. Es fácil que los labios de su hijo(a) se sequen, se partan o se agrieten. Aplique un bálsamo labial, un ungüento o una crema con lanolina en los labios de su hijo(a), al menos, dos veces al día. Además, aplique bálsamo labial según sea necesario cuando los labios estén secos. Elija un bálsamo labial o un ungüento que no tenga fragancia y que sea seguro para la piel sensible. No permita que su hijo(a) tire de la piel descamada. Esto puede causar que se produzcan llagas o infecciones. Lamerse los labios también puede empeorar los labios partidos.

Evite la sequedad bucal

La sequedad bucal ocurre cuando hay muy poca saliva o la saliva es demasiado espesa. Esto puede suceder si su hijo(a) está deshidratado(a). También puede ser un efecto secundario de la quimioterapia, los medicamentos o la radioterapia. Los pacientes que tienen un tubo para ayudarles a respirar (intubación) o que tienen una sonda de alimentación también corren un mayor riesgo de sequedad bucal.

La sequedad bucal puede causar problemas como dolor de garganta, problemas para hablar o tragar, ronquera y mal aliento. La saliva ayuda a proteger los dientes, ya que elimina los restos de alimentos, las bacterias y los ácidos. Con el tiempo, la sequedad bucal puede provocar caries en los dientes.

A continuación, le indicamos algunas maneras en que su hijo(a) puede ayudar a prevenir o controlar la sequedad bucal:

  • Masticar goma de mascar sin azúcar o chupar caramelos sin azúcar. Asegúrese de que su hijo(a) pueda consumirlos de forma segura.
  • Beber sorbos de agua o dejar que se derritan trozos de hielo en la boca de su hijo(a).
  • Respirar por la nariz en lugar de por la boca.
  • Limitar el consumo de cafeína.
  • Usar un sustituto de saliva o enjuague bucal según lo recomendado por su proveedor de atención médica.

Examine la boca para detectar posibles llagas

La rutina de cuidado bucal de su hijo(a) debe incluir la examinación para detectar llagas en los labios, las encías, la lengua, las mejillas, la zona debajo de la lengua y el paladar. Diversas afecciones pueden causar llagas en la boca y estas son también un efecto secundario frecuente de la quimioterapia. Las llagas en la boca pueden ser dolorosas y aumentar el riesgo de infección. Además, pueden hacer que tragar, comer y beber sea más difícil.

Si su hijo(a) tiene llagas en la boca, un enfermero puede darle a su hijo(a) un enjuague bucal, un gel o un aerosol para disminuir el dolor causado por las llagas. Su hijo(a) también podría tomar medicamentos para aliviar el dolor o detener una infección.

Obtenga más información sobre las llagas bucales y el tratamiento contra el cáncer.

Los controles dentales regulares cada seis meses y la obtención regular de imágenes de los dientes, las raíces y la mandíbula ayudarán a detectar problemas dentales.

Los controles dentales regulares cada seis meses y la obtención regular de imágenes de los dientes, las raíces y la mandíbula ayudarán a detectar problemas dentales.

Recordatorios de salud bucal

Una buena salud bucal comienza con el cuidado bucal diario.

A continuación, le indicamos algunas medidas adicionales que puede tomar para tener una boca y unos dientes más sanos:

  • Acudir a exámenes dentales regularmente. Asegurarse de que el dentista conozca sus antecedentes médicos.
  • Beber agua con fluoruro. Limitar el consumo de bebidas azucaradas, como refrescos y bebidas deportivas.
  • Comer alimentos saludables bajos en azúcar.
  • Si vomita, enjuagarse la boca con agua. Cepillarse los dientes, si es posible. Los ácidos del estómago pueden dañar los dientes.
  • No compartir utensilios para comer ni otros artículos, como chupetes o juguetes para la dentición. Las bacterias presentes en la saliva pueden transmitirse de una persona a otra.
  • No hacerse perforaciones en la boca. Las perforaciones en la boca aumentan el riesgo de infección. Además, pueden dañar los dientes y las encías.
  • No fumar ni consumir otros productos con tabaco.
  • Consultar a un dentista si tiene inquietudes sobre la salud bucal. Los problemas frecuentes incluyen problemas de la mordida, apiñamiento dental, caries, decoloración de los dientes, sangrado de las encías, o bien dientes que no salen en la fecha prevista.

Encuentre más información en el sitio web de MouthHealthy de la ADA.


Revisado: junio del 2022