Saltar al contenido principal

Crisis aplásica

¿Qué es una crisis aplásica?

Una crisis aplásica sucede cuando la médula ósea de pronto deja de crear glóbulos rojosCuando el cuerpo no puede crear nuevos glóbulos rojos, no puede reemplazar las células a medida que se descomponen. El recuento de glóbulos rojos puede caer a niveles muy bajos. Esto puede provocar una anemia grave.

ilustración médica que muestra la anemia

La anemia aplásica puede causar anemia grave, o un número muy bajo de glóbulos rojos.

La crisis aplásica afecta principalmente a personas con anemia falciforme, esferocitosis hereditaria u otro trastorno sanguíneo similar en el que los glóbulos rojos se destruyen más rápidamente (anemia hemolítica). En los niños con anemia falciforme y otras anemias hemolíticas, la crisis aplásica suele ser desencadenada por una infección por parvovirus.

Una crisis aplásica puede causar anemia grave en niños con anemia falciforme y otras anemias hemolíticas. Puede poner en riesgo la vida si no se trata de inmediato.

Síntomas de la crisis aplásica

Entre los signos y síntomas de una crisis aplásica se incluyen los siguientes:

  • Sensación de debilidad o cansancio
  • Fiebre
  • Tos
  • Síntomas parecidos a los de la gripe
  • Dificultad para respirar
  • Latido irregular o rápido
  • Piel o labios pálidos

Sin tratamiento, es probable que los síntomas de su hijo(a) empeoren cada día en lugar de mejorar. 

Causas de una crisis aplásica

Una crisis aplásica suele ser desencadenada por una infección. Una de las causas más comunes es la infección por parvovirus B19 humano o "quinta enfermedad". Este virus hace que la médula ósea deje de producir nuevos glóbulos rojos de 7 a 10 días.

Una crisis aplásica no es un problema para la mayoría de las personas, porque los glóbulos rojos sanos duran entre 90 a 120 días. En las personas con anemia falciforme u otras anemias hemolíticas, los glóbulos rojos se descomponen con mayor facilidad. Los glóbulos rojos falciformes pueden durar solo de 7 a 20 días. Si su hijo(a) deja de producir nuevos glóbulos rojos repentinamente, puede desarrollar una anemia grave entre 1 y 2 semanas después de la infección.   

Una vez que un niño ha tenido parvovirus, rara vez lo vuelve a contraer. Es raro que una crisis aplásica ocurra más de una vez.  

Diagnóstico de la crisis aplásica

Una crisis aplásica se diagnostica según los antecedentes médicos, un examen físico y las pruebas de laboratorio de su hijo(a). Se pueden llevar a cabo las siguientes pruebas de laboratorio: 

Hemograma completo (CBC, por sus siglas en inglés). 

Un análisis de CBC determina lo siguiente:

  • La cantidad de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas  
  • El tamaño de los glóbulos rojos
  • Hematocrito, que muestra qué cantidad de la sangre está compuesta de glóbulos rojos 
  • Hemoglobina, una proteína en la sangre que lleva el oxígeno 

Los glóbulos rojos de las personas con anemia falciforme u otras anemias hemolíticas no duran tanto en el organismo como los glóbulos rojos normales. Como resultado, los niveles de hemoglobina pueden pasar a ser peligrosamente bajos durante una crisis aplásica.

Recuento de reticulocitos 

Un recuento de reticulocitos mide la cantidad de glóbulos rojos jóvenes en el cuerpo de su hijo(a). Un reticulocito es un glóbulo rojo nuevo que se forma en la médula ósea. Normalmente, estas células permanecen en la médula ósea hasta que se convierten en glóbulos rojos maduros. Luego, salen de la médula ósea y pasan al torrente sanguíneo. 

Una persona con anemia falciforme o anemia hemolítica generalmente tiene un recuento alto de reticulocitos. Pero durante una crisis aplásica, su recuento de reticulocitos puede llegar a cero.

Conocer el CBC y el recuento de reticulocitos de su hijo(a) permite que su equipo de atención sepa la gravedad de la anemia. Esto les ayuda a planificar los tratamientos. Estos recuentos pueden analizarse todos los días durante una crisis aplásica para controlar el estado de su hijo(a).

Análisis de parvovirus  

Se puede realizar un análisis de sangre para diagnosticar una infección activa por parvovirus.

Tratamiento de una crisis aplásica

Si su hijo presenta síntomas de crisis aplásica, busque atención médica de inmediato. El tratamiento de la crisis aplásica puede requerir hospitalización para recibir tratamientos y que se realicen pruebas de seguimiento.

Es posible que su hijo(a) necesite una transfusión de sangre si tiene anemia grave. Durante la transfusión, recibirá glóbulos rojos de un donante. Una transfusión de glóbulos rojos aumentará los niveles de glóbulos rojos y hemoglobina. Esto aumenta la capacidad de la sangre para transportar oxígeno hasta que la médula ósea pueda volver a producir nuevos glóbulos rojos.

Si su hijo(a) tiene una crisis aplásica debido a una infección por parvovirus B19, se le aislará durante el tratamiento. Esto significa que permanecerá en una habitación alejada de otros pacientes. Las personas que entren a la habitación de su hijo(a) deben usar una mascarilla y una bata. Esto es necesario porque el parvovirus B19 puede propagarse de una persona a otra. No es peligroso para la mayoría de las personas, pero el parvovirus puede causar problemas para otras personas con anemia falciforme, otras anemias hemolíticas, mujeres embarazadas y bebés en gestación. 

Cuándo comunicarse con su equipo de atención médica

Llame a su equipo de atención médica si cree que su hijo(a) está sufriendo una crisis aplásica. Su hijo(a) necesita tratamiento para evitar problemas graves de salud, incluida la muerte.

Cuándo buscar atención de emergencia

Lleve a su hijo(a) a la sala de urgencias de inmediato si presenta alguno de estos síntomas:

  • Dificultad para respirar
  • Le cuesta despertarse
  • Está muy pálido
  • Actúa muy cansado

No espere a hablar con su equipo de atención médica si observa estos signos. Acuda a urgencias o llame inmediatamente a los servicios de emergencia.

Cómo reducir el riesgo de anemia aplásica de su hijo(a)

La anemia aplásica suele estar causada por una infección por parvovirus B19. Este virus es muy común y se propaga con facilidad. 

Si su hijo(a) tiene anemia de células falciformes o un trastorno sanguíneo similar, tome medidas para prevenir la infección. Informe a su equipo de atención médica si alguien de su familia puede haber estado expuesto a alguien con parvovirus o quinta enfermedad. 

Las mujeres embarazadas también deben mantenerse alejadas de un niño con quinta enfermedad o crisis aplásica. Si una mujer embarazada estuvo cerca de alguien con parvovirus, debe informar a su médico de inmediato. El virus puede dañar a un bebé en gestación.

Entre las medidas generales para ayudar a prevenir la propagación de gérmenes e infecciones se incluye lo siguiente:

  • Lávese las manos con frecuencia. Use agua y jabón o un desinfectante para manos a base de alcohol. 
  • Cúbrase al estornudar o toser.  
  • Manténgase alejado de las personas que están enfermas.
  • Evite tocarse los ojos, la nariz o la boca.
  • Reciba las vacunas que su equipo de atención recomiende.  

Preguntas para hacerle al equipo de atención médica

  • ¿Cuál es la causa de la crisis aplásica de mi hijo(a)?
  • ¿Qué pruebas necesita mi hijo(a) y con qué frecuencia deben hacerse?
  • ¿Qué tratamientos existen para las crisis aplásicas?
  • ¿Cuáles son las posibles complicaciones de las crisis aplásicas?
  • ¿A qué señales de advertencia por emergencia debo estar atento?

Puntos clave sobre la crisis aplásica

  • Una crisis aplásica se produce cuando la médula ósea no produce suficientes glóbulos rojos nuevos para reponer las células sanguíneas una vez que se han deteriorado.
  • Esto puede provocar anemia grave, o una cantidad muy baja de glóbulos rojos.
  • La crisis aplásica puede ser un problema de salud grave en niños que padecen anemia de células falciformes.
  • Una crisis aplásica suele ser causada por una infección con el virus llamado parvovirus humano B19, o "quinta enfermedad". 
  • Si su hijo tiene anemia falciforme y presenta síntomas de crisis aplásica, busque atención médica de inmediato. 


Revisado: agosto de 2024

Contenido relacionado