Un trastorno hemorrágico es una enfermedad que impide que la sangre coagule correctamente. Normalmente, unas células sanguíneas llamadas plaquetas y unas proteínas llamadas factores de coagulación ayudan a que la sangre forme un coágulo para detener el sangrado. Si su hijo(a) tiene un trastorno hemorrágico, el sangrado puede ser abundante o durar mucho tiempo.
Es importante actuar con rapidez cuando su hijo(a) tenga un sangrado. Los episodios de sangrado suelen ser leves. Los sangrados leves pueden deberse a una lesión y provocar un corte, una herida o un hematoma. El sangrado también puede producirse sin lesión, como un sangrado nasal. Normalmente puede tratar estos episodios en casa.
Si el sangrado es grave o no se detiene, acuda a un centro de atención médica de inmediato.
Estos pasos básicos de primeros auxilios pueden ser útiles si su hijo(a) tiene un sangrado o lesión leves que se pueden tratar en el hogar. Siempre siga las instrucciones proporcionadas por su equipo de atención médica.
Utilice un paño limpio, una toalla o una gasa para presionar suavemente sobre la herida. Manténgala así hasta que deje de sangrar.
Antes de curar un corte o una herida, lávese bien las manos con agua y jabón. Enjuague la herida para eliminar la suciedad y los restos. Limpie la herida con agua y jabón. Enjuague bien. Seque la zona y cúbrala con una venda o gasa estéril.
Siga el método RICE para tratar el sangrado leve.
El método RICE puede reducir el dolor y la hinchazón, y evitar sangrado nuevo. También es útil para esguinces, distensiones y contusiones. Los pasos del método RICE incluyen lo siguiente:
Continúe con el método RICE durante, al menos, 24 horas.
En el caso de cortes y heridas, mantenga la zona limpia y seca y tome medidas para evitar infecciones. Hable con su equipo de atención médica sobre cualquier instrucción especial para el cuidado de las heridas.
No administre analgésicos AINE (antiinflamatorios no esteroideos) de venta libre sin consultar con el proveedor de atención médica.
Las actividades cotidianas pueden provocar sangrados o hematomas. Siga estos consejos para cuidar a su hijo(a) en casa.
Acuda a un centro de asistencia médica si ocurre lo siguiente:
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Revisado: Julio del 2024
La trombocitopenia (recuento bajo de plaquetas) puede provocar sangrado y hematomas. Obtenga información sobre los síntomas y el tratamiento de la trombocitopenia.
A la mayoría de los niños con trastornos hemorrágicos se les pueden administrar vacunas rutinarias. Obtenga información sobre cómo prevenir sangrados y moretones con las vacunas infantiles.