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Ayudar a los hermanos con el duelo

¿Qué pueden esperar los padres cuando un hijo está en duelo?

El duelo de los niños, como el de los adultos, es un proceso. Los niños sienten y demuestran una variedad de emociones cuando experimentan el duelo. Los sentimientos pueden incluir tristeza, enojo, culpa o negación.

Es posible que los niños en duelo hagan lo siguiente:

  • Llorar
  • Portarse mal
  • Retraerse
  • Tener problemas para dormir
  • No tener mucho apetito
  • Tener síntomas físicos como dolor de estómago
  • No parecer afectados
  • Utilizar el juego para descansar del duelo

Los niños suelen “autorregular” el flujo de información. Pueden hacer una pregunta, escuchar la respuesta y volver a jugar inmediatamente mientras procesan lo que acaban de oír.

Estos sentimientos y comportamientos son respuestas normales ante el duelo.

Hablar sobre la muerte

Hablar de la muerte de un niño con otros niños puede ser una de las cosas más difíciles para los padres. Los padres deben tener en cuenta la capacidad de cada niño para comprender la muerte y su permanencia. La forma en que un niño procesa esta información depende de varios factores. Entre ellos, la edad, la etapa de desarrollo y las experiencias de vida.

Estas conversaciones no son fáciles. Pero los padres pueden hacer algunas cosas para iniciar las conversaciones.    

  • Hable honesta y directamente. Utilice palabras sencillas como “murió” en lugar de “falleció” o “pasó a mejor vida”. Los padres suelen querer suavizar lo que dicen. Pero a veces esto puede confundir a los niños aún más o generarles incertidumbres.
  • Explíque la muerte de la forma más sencilla posible y en un lenguaje que su hijo(a) pueda entender. Algunos niños piensan que la muerte no es permanente. Podría decir: “Cuando alguien muere, significa que su cuerpo ya no funciona. No puede hablar, ni caminar, ni comer, ni dormir, ni jugar...”.
  • Evite usar frases como “Dios se lo llevó al cielo” o “está con la abuela ahora”.
  • Repita los mismos detalles varias veces de distintas maneras. Compruebe qué entienden los niños y qué temores pueden tener. Por ejemplo, puede decir: “¿En qué parte estás pensando más?” o “Acabo de decir muchas cosas. ¿Qué has oído?”.
  • Piense en las primeras conversaciones solamente como el primer paso. Ofrezca solo los detalles que el niño le pida o que le parezca que el niño está listo para recibir. Asegúreles a los niños que está bien hablar sobre la muerte y que está bien hacer preguntas.
  • Dé espacio a los niños para procesar la información. Esté presente cuando los niños estén dispuestos a hablar. Algunos niños sacarán el tema por sí mismos o darán pequeñas pistas de que quieren hablar. Otros pueden necesitar varios intentos antes de que estén listos para compartir lo que están pensando o sintiendo.
  • Hable sobre los sentimientos. Los niños a menudo siguen el ejemplo de los padres para plantear un tema. Si los padres comparten sus sentimientos, es más probable que los niños hablen sobre sus propios pensamientos y sentimientos.
Una mariposa se posa en una flor.

Conversar sobre una pérdida con los niños suele ser difícil para los padres.

Ayudar a los niños a que sepan qué esperar

Saber qué esperar les da a los niños una sensación de seguridad. Para muchos niños, la muerte de un hermano es una de las primeras veces que experimentan una pérdida y duelo real.

Mientras lidian con sus propias emociones, los niños deben sobrellevar ver las respuestas de sus padres. Esto puede hacer que los niños sientan incertidumbre y miedo. Los niños tampoco comprenden las preocupaciones concretas con las que las familias deben lidiar después de la muerte.

Es importante para los niños tener una noción de lo que ocurrirá. Esto puede disminuir sus preguntas y preocupaciones.

  • Ayude a los niños a procesar sus emociones y discutan cómo responder a las emociones de los demás. Fomente la expresión constructiva incluso cuando los sentimientos sean difíciles de compartir. Por ejemplo: “Veo lo dolido y enfadado que estás. Cuando te sientes así, está bien golpear una almohada, pero no está bien golpear a tus amigos”.
  • Hágales saber que sus sentimientos son normales y que todos lidian con el duelo de maneras diferentes.
  • En la medida de lo posible, informe a los niños lo que va a ocurrir con antelación. Asegúreles que serán cuidados.
  • Brinde opciones a los niños sobre qué hacer. Ayúdeles a regresar a las rutinas y las actividades familiares.
  • Hablen sobre los miedos y la incertidumbre, pero encuentren maneras de reconectarse con sus rutinas y tradiciones de familia.

Preguntas y emociones comunes

Después de la muerte de un hermano o una hermana, los niños pueden tener preocupaciones que no tienen respuestas fáciles. Los padres pueden tratar de planificar para las preguntas que sus hijos podrían tener.

Sentir culpa

Los niños, a menudo, tienen una sensación de culpa cuando un hermano fallece. Es importante que los niños sepan que ellos no tienen la culpa. No deben sentirse culpables por lo que pasó. Los enfoques para discutir esto incluyen:

  • “Nada de lo que tú o cualquiera haya hecho, pensado o dicho hizo que esto pasara”.
  • “Has hecho un buen trabajo en lo que se te pidió, incluso cuando era difícil”.
  • “No es la culpa de nadie”.

Preguntarse por qué su hermano o hermana murió 

En la mayoría de los casos, se desconocen las causas del cáncer. Pero eso no impide que los padres pregunten por qué pasó. Lo mismo les sucede a los niños. Algunas de las maneras en que puede responder esta pregunta son las siguientes:

  • “No estamos seguros. ¿Qué piensas tú?” Esto puede ayudar a los padres a saber qué piensan los niños y qué es lo que ya saben.
  • “Parece que quieres hablar de lo que pasó. ¿Es así?” Demostrar interés puede ayudar a los niños a sentirse cómodos expresando sus sentimientos.
  • “A veces, cuando el cuerpo de una persona se enferma, sin importar cuánto uno lo intente, no se puede hacer nada para mejorarlo. ¿Has pensado en esto?” Esta respuesta abre la puerta para que los niños hagan más preguntas.

Preguntar qué pasa después de la muerte 

Si las familias creen en la vida después de la muerte, los padres pueden conversar sobre cómo es este nuevo lugar. Algunos niños encuentran consuelo en conversar quién más puede estar allí y qué están haciendo.

Las familias que no creen en una vida después de la muerte podrían compartir algo como: “Cuando nuestros cuerpos dejan de funcionar, vuelven a la tierra y se convierten en parte del mundo que compartimos con las plantas y los animales”.

Saber lo que los niños piensan que ocurre después de que alguien muere también puede dar consuelo a los padres. Esta discusión también pueden ser una oportunidad para aclarar ideas equivocadas. Los libros de cuentos que coinciden con los valores y las creencias de la familia también pueden ayudar a los padres a conversar sobre la muerte. Los padres pueden decir algo como lo siguiente:

  • “El amor que compartimos nunca se acabará. Se quedará con nosotros y siempre será una parte de nuestras vidas”.
  • “Hay amor en cada uno de los recuerdos que tuvimos juntos, y eso se quedará aquí con nosotros”.

Ver al niño de nuevo 

Es común que un hermano pregunte “¿volveré a ver a mi hermano o hermana?” Según las creencias espirituales, los padres pueden responder con algo como lo siguiente:

  • “No podrás ver a tu hermano de nuevo porque ya no está aquí, en la tierra, con nosotros”.
  • “No puedes verla o tocarla, pero puedes recordarla en tu corazón y en tu mente”.

Recordar a su hermano o hermana

Es importante asegurarse de que sus hijos sepan que su hermano o hermana siempre será parte de la familia y que no lo olvidarán. Los niños pueden querer escuchar historias o recuerdos específicos. Compartir cenas, vacaciones, cumpleaños o actividades favoritas puede asegurarles a los hermanos que seguirán conectados a su hermano o hermana.

Anime a los niños a compartir sus ideas sobre cosas que la familia puede hacer en momentos especiales para recordar a su hermano o hermana. Puede decir algo como:

  • “Para el cumpleaños de tu hermana el año que viene, elijamos un globo, vayamos a un lugar especial y dejémoslo volar alto en el aire mientras pensamos en ella”.
  • “El primer día de cada mes, comamos una de las comidas favoritas de tu hermano”.
  • “¿Qué cosa especial quisieras hacer para recordarla?”

Seguir adelante 

Los niños en duelo a menudo preguntan “¿qué haremos?” Puede resultar útil admitir que es difícil continuar. Tranquilice a los niños asegurándoles que la familia permanecerá junta. Pueden apoyarse mutuamente al decir: “Es difícil imaginar que no estemos todos juntos. Encontraremos formas de recordar a tu hermana y de incluirla en nuestra familia. Ella siempre será tu hermana”.

Ser honesto con los sentimientos

Cuando los padres expresan sus sentimientos, esto puede ayudar a los niños a comprender que no están solos y que sus sentimientos son normales. Es importante permitirles a los niños que expresen sus emociones más genuinas.

Sería recomendable decirles a los niños que comparte sus sentimientos y que son normales. Las formas posibles de conversar esto incluyen:

  • “Mamá se siente triste porque la medicina no pudo hacer que el cáncer dejara de crecer”.
  • “A veces, me siento triste y llorar es una de las formas en que ayudo a sacar mis sentimientos”.
  • “Papi se está sintiendo horrible en este momento. ¿Cómo te estás sintiendo tú?”

A veces, los padres no saben qué decir. Está bien que los padres demoren las respuestas a una pregunta hasta que se sientan más preparados. Lo más importante es comunicarles a los niños que está bien hacer preguntas.

Si los niños saben que los padres también están luchando con las respuestas, ellos pueden ser más honestos sobre sus propias batallas. Una respuesta simple podría ser: “Esa es una pregunta difícil. Yo también he estado pensando en eso”.

Proyectos para ayudar a los niños con el duelo y a recordar

Una manera de apoyar a los niños en duelo es hacer algo con ellos para honrar y recordar a su hermano o hermana. Los niños podrían tener ideas sobre qué quisieran hacer. Estas ideas pueden ser una fuente de gran consuelo.

Estas son algunas ideas de proyectos para ayudar a los niños a procesar el duelo y recordar:

  • Hacer un libro de citas, historias memorables o fotos.
  • Crear un libro sobre la vida del niño o de sus recuerdos favoritos juntos.
  • Escribir un poema o canción.
  • Crear un blog o diario sobre el niño.
  • Despedirse en una carta o discurso que pueda dar a personas especiales (o colocar con el fallecido antes del entierro).
  • Plantar un árbol o una flor en conmemoración del niño.
  • Escribir sobre un globo o poner mensajes dentro de un globo y dejarlo volar.
  • Encontrar algo especial que el niño pueda cuidar y mantener cerca.

Aspectos clave sobre ayudar a los hermanos con el dolor

  • El duelo es un proceso para los niños y para los adultos.
  • Los niños sienten y muestran una variedad de emociones durante el duelo.
  • Los padres deberían conversar con sinceridad con sus hijos sobre la muerte de una manera que sea la adecuada para su edad y nivel de desarrollo.
  • Completar un proyecto de recuerdo para honrar y recordar a su hermano o hermana es una forma de apoyar y consolar al niño en duelo.


Revisado: Septiembre de 2023

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