Cuidado médico de apoyo
La warfarina (también llamada Coumadin®) es un anticoagulante. “Anti” significa “contra” y “coagulante” se refiere a la coagulación de la sangre. Un anticoagulante ayuda a reducir la formación de coágulos en la sangre. La warfarina se utiliza para tratar coágulos sanguíneos dañinos (trombosis) en venas o arterias o para prevenir la reaparición de coágulos sanguíneos. También se utiliza para prevenir la formación de coágulos sanguíneos después de ciertas cirugías o períodos de inactividad, o en casos de válvulas cardíacas artificiales.
La warfarina está disponible en comprimidos de varias concentraciones. Todos se toman por vía oral. A continuación se muestra una lista con las concentraciones de los comprimidos y sus colores:
Los síntomas de una reacción alérgica incluyen los siguientes: erupciones, urticaria, comezón, escalofríos, fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, dificultad para respirar, tos, opresión en la garganta e hinchazón en la cara o en el cuello.
No todos los pacientes que toman warfarina experimentarán estos efectos secundarios. Los efectos secundarios comunes están en negrita, pero también pueden existir otros. Informe cualquier sospecha de efectos secundarios a su médico o farmacéutico.
Obtenga más información sobre los efectos secundarios.
Asegúrese de analizar todas las preguntas e instrucciones con su médico o farmacéutico.