Los miembros del personal de St. Jude trabajan para dar a su hijo(a) comodidad, seguridad y protección de la manera menos restrictiva posible. Puede haber un momento en el que tengamos que limitar el movimiento de su hijo(a) para evitar que se lesione a sí mismo(a) o que le haga daño a los demás.
Las correas de sujeción son dispositivos que limitan o restringen el movimiento. Solo las utilizamos cuando otras formas de mantener a su hijo(a) seguro(a) no funcionan.
Por lo general, son correas de sujeción de espuma suaves que se atan a la cama. Se atan de una manera que evita que su hijo(a) se las saque, pero permiten que el personal las retire fácilmente cuando sea necesario.
La seguridad de su hijo(a) es nuestra mayor preocupación. A veces, una enfermedad, una lesión o los medicamentos pueden hacer que un niño esté confundido. Si hay peligro de que su hijo(a) se lesione a sí mismo(a) o le haga daño a otros, hay cosas que podemos hacer para ayudar a mantenerlo(a) seguro(a).
Estas son algunas de las cosas que podríamos probar antes de utilizar las correas de sujeción:
Cuando el equipo de atención decida que su hijo(a) está seguro(a) sin correas de sujeción, se las quitarán de inmediato.
Si tiene preguntas sobre las correas de sujeción, hable con el médico o el enfermero de su hijo(a).
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Revisado: Julio del 2022